Son reacciones inmunológicas anormales que presentan un grupo de pacientes hipersensibles, que reaccionan ante substancias o alergenos produciendo síntomas que a los no alérgicos no les afectan.

El origen de las alergias radica en las bases genéticas  y/o hereditarias y en la exposición adquirida a los alergenos que sensibilizan al paciente, volviéndolo alérgico bajo esta susceptibilidad hereditaria para padecer alguna enfermedad alérgica.

Las substancias que producen las alergias son alergenos comunes:

  • Polvo casero.
  • Hongos intra y extra domiciliarios.
  • Pólenes.
  • Mascotas con pelo (gato, perro, ganado, roedores).
  • Cucarachas y ácaros del polvo.
  • Algunos alimentos con conservadores.
  • Productos químicos y físicos productores de alergias.

Existen factores de riesgo para las alergias:

  • Falta de seno materno.
  • Exposición temprana a alimentos sólidos.
  • Humo del tabaco.
  • Padres alérgicos.
  • Enfermedades virales.
  • Cuidados excesivos en etapas de lactante.
  • Exposición a mascotas.
  • Hogares contaminados por esporas y hongos.

La marcha alérgica es la evolución natural de la enfermedad alérgica que va por etapas, iniciando con problemas de alergia alimentaría, alergias cutáneas, alergias respiratorias (rinitis alérgica) y culminando con alergias severas como el asma y otras complicaciones como otitis media y sinusitis.

Las enfermedades alérgicas principales son:

  • Rinitis alérgica, asma bronquial, otitis y sinusitis alérgicas.
  • Dermatitis atópica, urticaria y dermatitis por contacto.
  • Alergia por alimentos.
  • Alergia por medicamentos.
  • Alergia ocular (Conjuntivitis, blefaritis).
  • Alergia por picaduras de insectos.
  • Anafilaxia.
  • Niños con bajas defensas (inmunodeficiencia congénita e inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
  • Enfermedades autoinmunes: lupus, artritis, dermatomiositis y esclerodermia.