“En un mundo donde la conversación sobre vacunas a menudo gira en torno a los más pequeños, surge una pregunta fundamental: ¿y qué pasa con los adultos? La realidad es que la necesidad de protegernos contra enfermedades prevenibles no desaparece a medida que sopla cada vela de cumpleaños. De hecho, algunas vacunas son incluso más cruciales en las etapas posteriores de la vida.

La vacunación en adultos es una piedra angular en la prevención de enfermedades que pueden alterar significativamente nuestra calidad de vida, afectar a nuestras familias y, en casos extremos, amenazar nuestra existencia. Desde la gripe hasta el neumococo, pasando por el herpes zóster y la COVID-19, las vacunas ofrecen un escudo protector que muchos de nosotros subestimamos o ignoramos por completo.

Este artículo es una invitación a repensar la inmunización como un viaje que dura toda la vida, no solo como un rito de paso en la infancia. Acompáñame en este recorrido informativo que destaca por qué la vacunación para adultos no es solo una opción, sino una necesidad imperativa para mantener no solo nuestra salud individual, sino también la salud pública global.”

La vacunación no es solo para niños. Adultos y especialmente los adultos mayores también necesitan vacunarse para protegerse contra enfermedades. 

A medida que envejecemos, nuestro sistema inmunológico se debilita, haciéndonos más susceptibles a enfermedades como la gripe, neumonía, y el herpes zóster.

Vacunas importantes para adultos:

  • Gripe (Influenza): Se recomienda anualmente para todos los adultos, especialmente importante para aquellos mayores de 65 años, embarazadas, y con condiciones crónicas.
  • Tdap (Tétanos, Difteria, Tos ferina): Adultos deben recibir un refuerzo de Tdap una vez y luego un refuerzo de Td cada 10 años.
  • VPH (Virus del Papiloma Humano): Recomendada para adultos jóvenes hasta los 26 años para prevenir el cáncer cervical y otros tipos de cánceres asociados al VPH.
  • Herpes Zóster: Para adultos mayores de 50 años, protege contra el herpes zóster y la neuralgia postherpética, una complicación dolorosa de la culebrilla.
  • Neumococo: Para adultos mayores de 65 años y adultos con ciertas condiciones de salud, protege contra enfermedades neumocócicas como la neumonía.

La vacunación es una herramienta poderosa de prevención. Consulta con tu médico sobre las vacunas recomendadas para ti o tus seres queridos adultos y mayores.